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Descripción

López, Gregorio (venerable varón)
Doctores Mathias de Salzedo Mariaca y Joseph Dias Brizvela (Añadido, corregido y enmendado. Con notas)
Tesoro de medicinas para diversas enfermedades
8ª ed., 1ª ed. del IMSS
México, IMSS / INAH, 1990
XXXVII-86 p.
29 cm x 22 cm
ISBN 9688245097

Encuadernado en pasta dura forrada en tela editorial, con Camisa. Buen estado: sin signos de uso y algunos signos de edad y manipulación (camisa con signos de manipulación, dedicatoria manuscrita en página de cortesía).

“Gregorio López es considerado el primer ermitaño instalado en la Nueva España. Contó con fama de taumaturgo, sobre todo tras su fallecimiento y alguno de sus biógrafos lo identificó como Carlos, el hijo fallecido del rey Felipe II. López es autor de una obra que, probablemente, comenzó a redactar durante su internamiento en el hospital de Huastepec y que fue editada tardíamente, durante el siglo XVII, con adiciones de otros médicos, por lo que el manuscrito de este texto, de 43 hojas a cuartilla, circuló por los hospitales de la Región Huasteca.
En 1672, el Tesoro de medicinas fue impreso por Francisco Rodríguez Lupercio, mercader de libros, y anotado por el doctor Matías de Salcedo Mariana, médico del virrey Mancera. En la obra, por orden alfabético, se consignan los males o padecimientos, sus síntomas y las recetas o indicaciones terapéuticas para combatirlos. Según Fernández del Castillo (1965), en la obra de López destacan los recursos de la medicina «popular» como utilizar ventosas en el estómago o decir cosas de admiración (asustar) a quienes padecen «ahipo», prácticas que perviven en México y la América actuales.
El Tesoro de medicinas ostenta un epígrafe latino de Jesús Bensyrac, El Eclesiástico: «Dios creó los medicamentos en la tierra y el hombre prudente no los desprecia» (fol. 1r). Así, López escribió su texto para que fuera aprovechado en la práctica, principalmente, por los usuarios de las estancias y pueblos apartados sin médicos o boticas donde se atendían muchos pobres a quienes se les daba cura, alivio y consuelo. “

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